Cómo vencer el miedo a emprender y cambiar pensamientos negativos
¿Estás en tu trabajo que te tiene desmotivad@ y que no te permite aportar como te gustaría? ¿Quieres más desafíos que tu trabajo actual y quieres reinventarte?
¡Excelente! Yo también estuve ahí y he trabajado con más emprendedores que estuvieron en esa situación y se animaron a dar el salto (y hoy sabemos que esto es una constante)… Porque a veces, por mucho miedo que nos pueda dar salir de ese cubículo o de esa oficina, seguir ahí nos da aún MÁS miedo o angustia… Vivir una vida sin propósito o que no nos hace sentido nos parece aún menos atractiva y queremos tomar las riendas y dedicarnos a nuestros proyectos…
Ahora… mientras “tomas vuelo” o impulso para dar el paso hasta que renuncies (o ya estés súper establecid@), pueden pasar algunas cosas en tu cabeza, especialmente algunos miedos... como por ejemplo el miedo fracaso, el miedo a que no resulte como queremos, miedo o vergüenza a vender mis productos o servicios, miedo a que a la gente no le guste, a que me critiquen, a no tener ingresos estables, etc… Y con eso vas postergando tu decisión e inicio de tu soñado emprendimiento.
Entonces, ¿cómo cambiar esos pensamientos que te llevan a la duda y al miedo a emprender?
1. Tener claridad de por qué quieres emprender (sí me lo has escuchado antes, pero es que ¡es taaaan importante!)… Tu propósito, la razón de emprender, el motivo de querer tomar ese riesgo. Conectarte contigo y tener esa razón que hará que todo valga la pena.
2. Definir tu emprendimiento de manera clara, considerando siempre el problema que resuelves y a quién te diriges, y tener claridad de tu idea de negocio. Para más detalle de cómo definir tu emprendimiento, recuerda revisar mi "Mapa para Definir tu Emprendimiento". Si aún no lo has descargado, puedes descargarlo GRATIS haciendo click aquí.
3. Empezar a testear y ofrecer tus productos o servicios. Tener un prototipo o producto inicial, empezar a hablar con tus potenciales clientes, averiguar cuáles son sus principales problemas o empezar a trabajar con ellos te dará mayor confianza y seguridad, al mismo tiempo que empiezas a tener feedback y así puedes ir mejorando tu oferta.
4. Tener un objetivo claro de lo que quieres lograr con tu emprendimiento los primeros 6 meses o el primer año. Ya sea darte a conocer, posicionarte, vender, aumentar las ventas, lanzar el proyecto, etc. De esta manera podrás planificar qué actividades harás ese primer año, en qué invertirás, cuándo podrás hacer ventas, y también cuándo será el mejor momento para renunciar (si es el caso).
5. Tener claridad de tus costos fijos y variables personales, para saber cuál es el sueldo que realmente necesitas al emprender. Puede ser que por un tiempo puedas acomodarte y "sacrificar" ciertos gustos o "lujos", si es factible para ti, y que puedas pagar tus gastos fijos con un sueldo menor. Si no es el caso, tener claridad de esto de todas maneras te permitirá tener un mejor plan financiero personal y de tu negocio; así como los objetivos que deberías tener (relacionado al punto anterior).
6. Tener un plan claro de las acciones a realizar y considerando diferentes escenarios de ganancias para tu negocio (uno optimista, uno realista y uno pesimista). Así también tendrás claridad de las acciones a tomar y de tus finanzas.
7. Y por último…
¡Deja de preguntarte qué pasaría si todo sale mal… y empieza a preguntarte!:
¿Qué pasaría si todo sale BIEN?
¿Qué pasaría si la gente ama mis productos o servicios?
¿Qué pasaría si me dedico a lo que amo y gano dinero con eso?
¿Qué pasaría si logro las ventas y mi sueldo base antes de lo planificado?
¿Qué pasaría si la gente hace fila por verme y escucharme?
¿Qué pasaría si gano más de lo que pensaba?
¿Qué pasaría si me lleno de clientes?
No conocemos el futuro… ya sea negativo o positivo… ¿y entonces, por qué solo le damos importancia a ese futuro negativo?
Recuerdo cuando un coachee/cliente me dijo que había hecho su tarea (que por supuesto era este ejercicio), y en la siguiente sesión me contó cómo empezó a cambiar su disposición a conversar con clientes y a ver nuevas oportunidades de ventas. Y no es magia, no te diré que cerró ventas millonarias, que ese momento fue LA clave y por eso ahora es multimillonario y que no tiene problemas en su empresa… no… Lo que sí te puedo decir es que ÉL CAMBIÓ, y por lo tanto empezó a ver oportunidades donde antes no veía y empezó a generar cambios, con los mismos clientes que ya tenía, con los mismos socios, con la misma empresa, con el mismo equipo, con la misma página web, con la misma marca, con el mismo logo, con el mismo presupuesto…
Así de potente es nuestro foco y lo que hacemos con éste…
Para terminar, como buena ingeniera, te recuerdo la fórmula para que la apliques desde ya =)
¿Qué sucedería si…? + Posibilidad futura positiva = Pensamiento positivo y más confianza
¡Éxito en tus proyectos!
Un abrazo,
María José Rivera
Coaching para Emprendimiento y Liderazgo